Es considerado uno de los logros más importantes del Estado de Derecho, sus orígenes más significativos descansan en la contraposición entre “el gobierno de los hombres” y el “gobierno de las leyes”.
En su acepción juridíca más aceptada, la legalidad como principio significa “conformidad a la ley”. Este principio se encuentra inmerso en los artículos 14 y 16 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
El artículo 14 establece que “Nadie podrá ser privado de la libertad o de sus propiedades, posesiones o derechos, sino mediante juicio seguido ante los tribunales previamente establecidos, en el, que se cumplan las formalidades esenciales del procedimiento y conforme a las leyes expedidas con anterioridad al hecho.”
Por otro lado, el articulo 16 tiene contemplado que “Nadie puede ser molesiado en su persona, familia, domicilio, papeles 0 posesiones, sino virtud de mandamiento escrito de la autoridad Competente, que funde y motive la causa legal del procedimiento”. El principio de legalidad suele enunciarse bajo el lema, que mientras los particulares pueden hacer todo aquello que no esté prohibido, las autoridades solo pueden hacer lo que la ley les permite..