Page 98 - Derecho humano a la cultura. Colecciones y coleccionismo
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Eric Eduardo Márquez y Manuel Alfonso Melgarejo
fragmentando, en arqueología quedó asignado el Arqlgo. Eduardo Merlo, en Historia
la Mtra. Blanca Lara, el Dr. Jesús Joel Peña Espinosa, y en Etnografía el Dr. Manlio
Barbossa Cano. En la renovación museográfica en 2019, aprovechando el estableci-
miento de un departamento de paleontología en el centro INAH Puebla, se creó una
sala de esta disciplina científica incorporándose al equipo de curadores, el Biol. Ivan
Alarcón Durán.
Cabe señalar que antes de la fundación del MUREP el panorama museístico de Puebla
se conformaba por el Museo Regional del Estado Casa de Alfeñique (1926), el Museo
Bello y González (1944), La Casa de los Hermanos Serdán (1960); y por el INAH: El
museo de Santa Mónica (1935), El Museo Fuerte de Loreto (1936) y el deshabitado Mu-
seo de Artesanías y turismo del Estado (1962) emplazado en Centro Cívico 5 de mayo.
A diferencia de los museos del Estado de Puebla, que se conforman por acervos con
distintas naturalezas mismas que han sido cedidos por el sector privado y las institu-
ciones, el MUREP como parte del INAH se centró principalmente en resguardar las
colecciones arqueológicas, ya que es un imperativo institucional en materia de protec-
ción y conservación del patrimonio nacional.
Las colecciones más antiguas del Museo Regional de Puebla
La actividad museística en Puebla tiene inicios en 1828 cuando se crea el Conservato-
rio de Artes o Museo de Antigüedades y Conservación de Artes y Oficios establecido
por José Manzo (Leicht, 2016). El acervo que compone el museo además de contener
obras artísticas con estilos e influencias artísticas europeas y producciones nacionales
de otras academias de arte, resguardaba acervos arqueológicos producto de donacio-
nes que llegaban a la academia. A diferencia de los bienes históricos y artísticos, el
material arqueológico llegaba a través de donaciones de personas y coleccionistas que
tenían en su posesión este tipo de objetos. Donaban a la academia lotes de piezas aún
desconocidas producto del posible saqueo y comercialización de objetos por distintos
lugares. Guadalupe Prieto señala que algunas personas donaron colecciones arqueo-
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