Page 319 - Más allá de la razón oyente digital digital
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Experiencias com-ún-itarias de iniciación en las señas
La voluntad que los sordos demuestran por aprender el español o seguir
manteniendo la comunicación oral como sucede entre algunos sordos postlingüis-
tas, deja entrever que nos situamos ante lo que algunos autores definen como «bi-
lingüización unilateral» (Bastardas y Boix, 1994; Calaforra, 2009). Esto es, en el
contexto de las relaciones de poder oyente-sordo, los segundos se ven obligados a
aprender la lengua dominante, aunque no necesariamente sucede al revés.
Ahora bien, la posición de Ángela en cuanto al papel «alfabetizador» que
los sordos desempeñan con respecto de los oyentes, refiere al hecho de saber reco-
nocerse como sordo, presentarse así en el espacio público y enseñar a los oyentes
cómo debe ser la comunicación con una persona sorda (oralizada, que sabe lectura
labiofacial). Si bien en este escenario se sigue jugando en la cancha de los oyentes,
tanto Ángela como el resto de quienes integran IncluSor, son conscientes de la ne-
cesidad de difundir la LSM entre oyentes, buscando penetrar en ámbitos cada vez
más amplios y diversos. 146 Lo que se revela en última instancia es la capacidad de
agencia y la difícil escisión entre la comunicación oral y en señas, sobre todo para los
sordos postlingüistas.
Temas como el dejar de pedir perdón o la misión alfabetizadora fueron co-
munes durante las sesiones de nuestro curso de conversación en LSM. Para cada
encuentro la profesora nos pedía preparar un tema, exponerlo en señas y luego de-
batirlo en grupo, aunque entre los oyentes era frecuente «aferrarnos» al español
oral o signado en el mejor de los casos. A veces sin darnos cuenta ya estábamos
oralizando. El objetivo del curso no era enseñar a «defenderse» siendo sordo, sino
ejercitarse en el dominio de un idioma. Sin embargo, aun cuando fuese el tema me-
nos político y relacionado con los sordos, generalmente terminábamos discutiendo
algún asunto referente a ellos y su comunidad. En las sesiones, sordos postlingüistas
y oyentes inscritos al curso, no sólo aprendíamos didácticamente a conversar en
señas; también estábamos adquiriendo lecciones acerca de lo que Ángela denomina
«mecanismos para sobrevivir siendo sordo». IncluSor se rige abiertamente por una
política de inclusión y de empoderamiento de los sordos. Su posición no es ajena al
oficio permanente de enseñar LSM.
En resumen, ingresar a un universo lingüístico como las señas, significa ha-
cerlo mediante un contexto social particular. Cada colectividad deposita en sus in-
146 IncluSor es una asociación que permanentemente ha buscado hacer vínculos e introducir la LSM en lugares como las
universidades, las cadenas de hoteles y las empresas bancarias.
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