Page 22 - Más allá de la razón oyente digital digital
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se acercó a gente enferma y la curó, de hecho, hizo que una persona sorda escuchara,
pero en este caso el desenlace fue distinto.
En la misma interacción la madre preguntó a qué se debía su padecimiento.
Ella contestó que hay hipoacusias debido a síndromes como el de Usher, las cuales
responden a un porcentaje del siete por ciento entre el total de casos. Por el contra-
rio, infecciones no atendidas, falta de algunas vacunas en los primeros años de vida
o ingesta de medicamentos ototóxicos representan más del 60 %. Señaló que en Mé-
xico hay bastantes situaciones heredo-familiares, es decir, tal vez la mamá y el papá
tenía dos genes parecidos que se asocian con el síndrome de Usher y lo heredaron
manifestándose en su descendencia.
Casi al final de la reunión otro participante habló del problema de su fami-
liar, quien parecía escuchar intermitentemente con los aparatos auditivos. La espe-
cialista lo vinculó con la neuropatía auditiva, en la cual cierta parte del oído puede
detectar sonido, pero no envía la señal adecuadamente al cerebro. Consideró que
en la actualidad han aumentado este tipo de casos. Pausándose para hablar, como si
se detuviera a pensar el mejor modo de decir las cosas, expresó que: «sin pretender
sonar elitista o racista, antes se casaban güerito con güerito, morenito con morenito,
en las etnias maya, por ejemplo, se respetaba un maya con un maya, pero ahora se
casa el negro con la güera, la güera con el mestizo y así sucesivamente, dando lugar
a muchas mezclas interraciales donde los genes se combinan y hacen cosas ¡raras!».
Aquí es necesario indicar que la doctora es «blanca» de ojos «claros».
Empleó su caso personal para explicar estas mezclas: sus padres son de ori-
gen mexicano, pero sus ancestros más antiguos son de origen europeo, entonces es
una «rara combinación»; la gente soltó una ligera risa con esta última afirmación. En
contraste con el síndrome de Usher, donde según su declaración sucede porque dos
genes son similares, en la neuropatía auditiva su origen está en la combinación de
genes de personas que son de distintas «razas». Al final habló de la marca y tipo de
aparatos auditivos que ella vende y coloca.
La presentación me generó preguntas en todas direcciones: ¿por qué las
personas sordas «deben aceptar la realidad»?, ¿en qué consiste esta realidad?, ¿por
qué para poder acceder a un trabajo tendrían que escuchar y hablar con la boca?,
¿es la persona sorda la que se debe adaptar verticalmente al mundo oyente o existen
otras alternativas?, ¿por qué hay personas sordas reticentes a los aparatos auditi-
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