Page 344 - Más allá de la razón oyente digital digital
P. 344
Gabriel Tolentino Tapia
sorda. La zona Rosa ha sido una colonia referente para la comunidad LGBTTTIQ+ y
las personas sordas también han concurrido. Miroslava narra parte de sus experien-
cias en los Vips cerca de la Zona rosa:
A veces hablamos del VIH, el SIDA, el uso del condón, cómo se debe usar, no hay intérprete,
entonces no hay como tanta ayuda, apoyo, solamente entre nosotros nos reunimos, explicándole
a los mismos compañeros sordos, el oyente de repente nos ve y ha de decir están enfermos, qué les
pasa, deben tener VIH, pero no nos importa, queremos tener esa confianza de estar en la mesa
(Miroslava).
En ocasiones, luego de las pláticas en el café, acuden a los bares LGBTTTIQ+
instalados en la zona. Miroslava tiene amistades sordas y oyentes, algunas con otros
tipos de discapacidad, que también pertenecen a la comunidad LGBTTTIQ+. Además
del encuentro en el contexto de la zona rosa, quienes forman partes de ambas comu-
nidades (sorda y LGBTTTIQ+) han forjado espacios periódicos de socialización. Por
ejemplo, en algunos programas de En Traducción han invitado a algunos sordos gay.
Durante una de esas sesiones el invitado expuso diversos temas referentes a los sordos
que se asumen como parte de la comunidad LGBTTTIQ+. Uno de los temas sugeren-
tes giró en torno del repertorio de señas que actualmente se usan para referirse a los
miembros de la comunidad LGBTTTIQ+. El invitado señaló que todavía no hay señas
para determinadas enfermedades y cuestiones de salud, que es necesario informar a
los sordos. También le preguntaron si existe alguna asociación. La misma pregunta hice
a Miroslava; ambos coinciden en que asociación civil como tal no, pero sí existe organi-
zación. El panelista de En Traducción comentó que fue hacia 1985 cuando comenzó el
movimiento con reuniones privadas y poco a poco se ha abierto paso.
Los integrantes de este movimiento han estado realizando encuentros anua-
les en el marco de la marcha LGBTTTIQ+ a finales de junio. Precisamente acudí a la
reunión de 2019. En aquella ocasión hubo diversas actividades: venta de distintos
productos por parte de integrantes de la comunidad sorda, muchos alusivos a las se-
ñas como tazas y ropa, pláticas sobre salud sexual y también una pasarela de moda
en la que precisamente Miroslava participó. Foto. Los integrantes de ambas comu-
nidades también participan anualmente como contingente en la marcha del orgullo
LGBTTTIQ+ que se realiza generalmente el último sábado de junio. Miroslava no se
permite faltar a la gran reunión.
Luego de la edición realizada en 2019 subió una foto a Fecebook que me
llamó la atención. El contingente sordo posaba en el Hemiciclo a Juárez, un sitio por
344

