Page 521 - Más allá de la razón oyente digital digital
P. 521
¿Quién es el sujeto Sordo? Capitales comunicativos y liderazgo
En términos generales, el liderazgo sordo resulta de la articulación de: 1) al-
gunos capitales comunicacionales de orientación oyente; 2) la posibilidad de contar
con motilidad y capitales sociales, económicos y culturales y; 3) no sólo un dominio
de la lengua de señas a nivel del usuario promedio, sino profundo, lo que también
incluye conocer aspectos como la historia de la comunidad, sus instituciones, per-
sonajes y procesos sociopolíticos. Sin embargo, aun con todos estos atributos, para
ser líder «legítimo» y no un «líder a fuerzas» (expresión utilizada por algún interlo-
cutor) es necesario contar con un respaldo social.
En esta tesitura, la definición de «líder sordo» se halla vinculada de manera
estrecha a un fenómeno filosófico y sociológico, a saber, el «reconocimiento». En
efecto, más allá de poseer uno o varios de los atributos hasta ahora descritos, es
necesario que un conjunto de personas los identifique en determinado sujeto y que
los vincule con el liderazgo. En la comunidad se dice que hay dos tipos de líderes:
los natos y los impuestos o autodeterminados. En cuanto a los primeros, se dice
que «hay algunos líderes que yo los veo haciendo su labor y de manera muy natural
como líderes porque lo tienen ya… lo nato» (Jessica). Ampliando esta idea, Zara, una
intérprete de señas hija de padre y madre sordos, puntualizó:
Ejemplo: Juan Pérez (nombre ficticio) es muy conocido, ayuda, colabora, pero Pedro García
(nombre ficticio) no tiene ese nivel de mando, entonces como Juan Pérez sí tiene una forma de ser
líder, entonces lo que hace es «te invito, te jalo» y es muy amigable y sociable. Invitas a todos los
compañeros para que formen parte de… y lo vuelven y líder entonces así de manera como natural
o innata es que nacen los líderes sordos (Zara).
Zara comienza sugiriendo que el conocimiento de la lectoescritura del espa-
ñol es importante y enseguida lo vincula con el ser conocido, sociable y amigable.
Además, esta clase de personas tiene la virtud de generar y saber proponer activi-
dades que son aceptadas por el resto y al hacerlo, de manera orgánica, le asignan la
investidura como líder. Relacionado con esta idea, otro interlocutor indicó en entre-
vista: «Juanita (nombre genérico) es una líder porque está un poquito más realizada
que Lupita (nombre genérico), entonces Lupita admira a Juanita y Juanita logra que
Lupita haga cosas, entiende, es algo muy complejo…».
Volviendo a Weber, él entiende que la dominación surge ahí donde, en una
relación, existe probabilidad de encontrar obediencia en un mandato, de modo tal
que el liderazgo sordo, como lo concibe mi interlocutor, precisa de un vínculo media-
do por la dominación y la consecuente aceptación de una orden. Hasta aquí, podría
521

